Cuando el ahorro y la tranquilidad van de la mano: El auge de las soluciones financieras con rentabilidad asegurada

Cada vez más personas apuestan por fórmulas de ahorro que garantizan el capital invertido y ofrecen una rentabilidad segura, sin exponerse a la volatilidad de los mercados

En un contexto de incertidumbre económica y mercados cada vez más cambiantes, muchas personas buscan fórmulas de ahorro que ofrezcan estabilidad, previsión y rentabilidad. Es aquí donde los productos de ahorro garantizado ganan protagonismo, convirtiéndose en una alternativa atractiva para quienes quieren asegurar su futuro financiero sin asumir riesgos innecesarios.

Este tipo de productos, comercializados habitualmente por entidades aseguradoras, se basan en una premisa clara: garantizar el capital aportado y ofrecer un tipo de interés fijo durante un período determinado. A diferencia de otras fórmulas de inversión, aquí no hay sorpresas. El asegurado sabe, desde el primer momento, cuál será el rendimiento final y qué recibirá al vencimiento, lo que aporta una gran tranquilidad y confianza.

Esta previsibilidad es uno de los grandes atractivos de los productos de ahorro garantizado. Pero no es el único. Muchos de estos instrumentos también incorporan una cobertura en caso de fallecimiento, de modo que los beneficiarios designados recibirán el capital ahorrado y, en muchos casos, con un complemento adicional. Esto convierte este tipo de productos en una doble herramienta: de ahorro y de protección familiar.

Entre las opciones más habituales se encuentran los PIAS (Planes Individuales de Ahorro Sistemático), pensados para generar una renta vitalicia en el futuro; los SIALP (Seguros Individuales de Ahorro a Largo Plazo), que ofrecen ventajas fiscales si se mantienen durante al menos cinco años; y las rentas vitalicias, que permiten transformar el capital acumulado en ingresos periódicos de por vida. En todos los casos, el objetivo es el mismo: garantizar el ahorro y ponerlo al servicio de la planificación personal y familiar.

Además de la rentabilidad asegurada, estos productos ofrecen flexibilidad en las aportaciones —que pueden ser únicas o periódicas— y, en muchos casos, permiten ajustar la duración del contrato según los objetivos de la persona asegurada. También existen opciones con participación en beneficios, que pueden añadir un plus a la rentabilidad inicial, en función de los resultados de la compañía aseguradora.

Otro aspecto a tener en cuenta son los beneficios fiscales, especialmente si se cumplen requisitos como mantener la inversión durante un mínimo de cinco años o percibir el capital en forma de renta. Esto puede suponer un ahorro considerable a medio y largo plazo.

Ahora bien, antes de contratar cualquier producto de ahorro garantizado, es importante informarse bien de las condiciones específicas, la solvencia de la entidad y las posibles penalizaciones por cancelación anticipada. Cada perfil de usuario tiene necesidades distintas, por lo que conviene asesorarse adecuadamente para escoger la fórmula más adecuada.

En Roca-Aixalà & López Correduría de Seguros te ofrecemos un asesoramiento cercano y personalizado para ayudarte a encontrar el producto de ahorro garantizado que mejor se adapte a tus necesidades. Contacta con nosotros y empieza a proteger tu futuro con garantías. Llámanos al 973 15 05 04 o ven a vernos. ¡Estaremos encantados de atenderte!

En definitiva, los productos de ahorro garantizado son una propuesta sólida para quienes valoran la seguridad por encima de todo, pero no quieren renunciar a hacer crecer sus ahorros. Una forma de mirar al futuro con confianza, sabiendo que el camino hacia los objetivos personales y familiares está bien trazado y protegido.

Laura Biela


Compartir